Whatsapp es una de las aplicaciones que más se ha popularizado entre los usuarios de telefonía móvil. Entre sus ventajas está la instantaneidad, las posibilidades de remitir multimedia y ser una aplicación gratuita, al menos, de momento.
Una de sus funciones son los chats de grupos o más popularmente conocidos como los grupos de Whatsapp. Como saben permiten a las personas que forman parte del grupo intercambiar mensajes, pudiendo participar todos a la vez en la conversación.
LOS GRUPOS DE PADRES Y MADRES DE CLASE
En el contexto escolar los Grupos se están extendiendo en dos líneas: los grupos de profesores, de los que ya hablaré en otra ocasión, y los grupos de padres y madres, de los que voy a hablar hoy.
Aspectos positivos
Normalmente el grupo lo forman padres y madres de una misma clase. Inicialmente es una opción muy práctica:
- Se intercambia y se comenta información referente a la clase y a los niños: sobre los deberes, estudios…
- Se pasan noticias que pueden ser importantes para todos:charlas, reuniones, noticias del colegio…
- Se utilizan como una forma de organización y de ponerse de acuerdo: los cumpleaños, los disfraces, trabajos en grupo…
Pero…
Sin embargo, en muchos casos los grupos de padres y madres de Whatsapp tienen “un pero“, pueden ”echarse a perder” y el uso ya no es tan positivo como al principio:
- Se hacen críticas destructivas hacia los profesores: que si manda muchos deberes, que si mandan pocos, que si grita mucho, que si es muy blando, que si esto, que si lo otro…
- En otros casos las críticas se dirigen hacia el resto de padres, los que no están en el grupo…
- A veces en los grupos sube el nivel y de las críticas al profesorado y al centro educativo, se pasa al insulto , a la mentira o a la calumnia…
- Se cuestiona la labor del profesor o del centro: que si el director, que si el jefe de estudios, que si el colegio…
CONSECUENCIAS
Cuando los grupos de padres y madres de Whatsapp se “echan a perder”, cosa que sucede con más frecuencia de lo que pensamos, las consecuencias no son buenas:
- En primer lugar se enfoca todo hacia lo negativo y eso no es sano. Se termina viendo solo el agujero… y nos olvidamos de la rosquilla.
- Se crean malos entendidos: “me han dicho…“; “dicen por ahí…“
- Cuando los “rumores negativos” afectan a nuestros hijos se comienza a generar resentimiento hacia el profesorado y el centro: “a mi hijo no lo atienden“; “a mi hijo le gritan“, “a tu hijo no le pasan una…”
- Se comienza a agrandar una imagen negativa del centro y de sus educadores, en especial, los profesores de sus hijos, que no se suele corresponder con la realidad.
Lo peor de todo es que, si parte de lo que se comenta en los grupos de Whatsapp es cierto, el chismorreo y el desahogo en el chat, no solo no mejora la situación… si no que la empeora.
ALGUNAS RECOMENDACIONES
Al final, en el caso de un colegio, lo que está en juego es la educación de sus hijos. Y en la educación de los hijos, o los profesores son sus colaboradores o de lo contrario, no será posible una verdadera Educación. Por eso, algunas recomendaciones que les ofrezco sobre este debate son las siguientes:
1. Uso adecuado de whatsapp
Utilícenlo adecuadamente. Eso quiere decir, úsenlo para intercambiar información, organizarse… estar informado.
2. Cortar los usos inadecuados
Si usted forma parte de un grupo de whatsapp y comienzan a utilizarse inadecuadamente, es decir, criticar, poner en cuestión, murmurar… intente cortarlo diciendo que ese uso no es adecuado, que eso no beneficia a sus hijos o de la manera que crea más oportuna.
3. Abandonar el grupo
Si sus intentos de cortar el mal uso no es eficaz, mi recomendación es que abandone el grupo y deje de estar en él. Si no lo hace y “dejar hacer“, yo considero que es cómplice por omisión.
4. Hablar con los profesores
Cualquier queja que tenga respecto a la educación de sus hijos no la trate de solucionar ni en whatsapp ni en la puerta del colegio: hable directamente con ellos.
En primer lugar, contraste la información con ellos y si hay algún problema, trate de que se solucione: si manda muchos deberes, si manda pocos, si grita, si no grita, si hace, si no hace…
Los profesores, como profesionales, les darán sus argumentos y créanme, que si están equivocados, la mayoría suele rectificar y cambiar: nadie quiere tener problemas con las familias.
Si tuviera la mala suerte de que los profesores no le atienden o no tienen en cuenta su descontento, pase al nivel superior: el equipo directivo. Y si este también le da la espalda acude a la Administración educativa.
Así que mi recomendación es que cuando participe en los grupos de whatsapp del colegio de sus hijos piense si su empleo beneficia su educación.
Fuente:Blog Familia y Cole
No hay comentarios:
Publicar un comentario